Cacería de perros en México D.F. – Los Perros y sus derechos

Como muchos de nuestros lectores habrán escuchado, en México D.F. actualmente se están teniendo una serie de sucesos que involucran a algunos perros en la muerte de varias personas en la zona de Iztapalapa. Consideramos importante mencionarlo porque esto puede tener repercusiones importantes en los derechos de los animales en la ciudad, así como las políticas públicas en torno a los mismos e incluso la legislación que los propietarios de perros deben respetar. En este artículo hacemos una breve cronología de los hechos con enlaces a notas periodísticas al respecto.Desde luego la sección de comentarios está abierta para expresar opiniones al respecto, e iremos actualizando la nota a medida que se den nuevos sucesos en torno a este asunto.

El asunto comenzó cuando el 5 de Enero Hallaron dos cadáveres de personas atacadas presuntamente por una jauría. Se habla de que es el segundo caso de este tipo pues el 29 de Diciembre aparecieron otros 2 muertos en la misma zona, con huellas de ataques de perro. Es interesante notar que este ataque del 29 de Diciembre no resultó en ningún reporte de importancia en los medios.

El 7 de Enero se reportó que Atrapan a jauría que “mató a 4 personas”. Esta primera nota dice “Una jauría mató a cuatro personas en Iztapalapa, confirma la PGJDF“. Esto es falso como se demostró después.

Foto La Jornada

El mismo día se empezó a desatar la “cacería de brujas” cuando se dijo que La SSP-DF buscará perros agresivos en los bosques de Chapultepec y Aragón. En la misma nota dice que “Anuncia Mancera campaña de esterilización de mascotas”.

Como siempre que pasa algo así, el tono empieza a subir, el 9 de Enero ya es noticia de primera plana. La gente comienza a sospechar, dicen que “los perros fueron azuzados” y  las familias dicen que no es cierto que las víctimas murieran por ataque de perros. Mientras las autoridades insisten en que sí fueron los perros, al tiempo que anuncian campaña de “esterilización masiva”. Por otro lado la gente de inmediato comienza a reaccionar. Las reacciones más importantes son de desconfianza, burla y reclamo ante las autoridades esencialmente por la percepción de que se culpa a los perros por un crimen que cometió alguna persona.

El día siguiente, 10 de enero, el SEMEFO dice que las muertes sí fueron por ataques de perros. El jefe de gobierno se “deslinda” diciendo que no fue el ministerio público quien dio este informe, de esta forma pretendiendo eludir responsabilidad por un supuesto “inculpamiento” de los perros. Se reporta que se han capturado 54 perros en la zona del ataque, y “como por arte de magia” las autoridades se dan cuenta de que en efecto hay un problema de sobrepoblación de perros callejeros, reportando por ejemplo la presencia de 300 perros en la zona de chapultepec.

Es hasta este día que empieza a haber una reacción de “defensa” de los animales. Vecinos de la zona dicen que los perros que ahí viven no son agresivos, expertos afirman que es difícil que los perros hayan atacado sin ser provocados (en esta nota). Las familias de las víctimas reprochan la actitud reactiva y apática de las autoridades. En esta nota se deja ver también que las autoridades tienen cero conocimiento y preparación en manejo de animales, pues apenas como reacción, y a toda prisa, empiezan a capacitar, elaborar manuales y preparar infraestructura.

Increíblemente es un diputado quien pide una investigación científica, afirmando que “Al no estar probado plenamente y ser poco creíble que la causa de la muerte de cinco personas fueron ataques de perros, se genera una cortina de humo que pudiese ocultar a los verdaderos responsables y la verdad misma. Y si se tratase de asaltos, violaciones, lesiones e incluso asesinatos, éstos quedarían impunes“.

Foto La Jornada

Finalmente se revela la verdad que básicamente todos sospechaban: El 11 de Enero Descartan ataque de los primeros 25 canes atrapados. Al menos una de las “víctimas” murió en una caída y los perros llegaron al lugar después de los hechos. Muchas de las ufanas declaraciones de la autoridad, así como su pericia, quedan ahora en duda y por los suelos. También se revelan tanto malos manejos de las “escenas del crimen” como la impunidad y descuido que impera en la zona donde aparecieron los cadáveres. Lo que parece claro es que los perros no fueron los causantes de estas muertes.

Al tiempo que la apresurada campaña de esterilización continúa, bajo la guisa de que los perros son un problema de salud pública, al empezar a calmarse un poco los ánimos se empieza a vislumbrar por fin el tema de cuidado y responsabilidad hacia las mascotas así como el de los derechos de los animales.

Bajo la presión de la gente que defendió los derechos de los animales y cuestionó a las autoridades, éstas decidieron terminar las redadas de perros al tiempo que se anunció que los perros capturados en Iztapalapa serán dados en adopción, tanto por parte de la delegación como con apoyo de asociaciones de protección a los animales. La campaña de esterilización masiva continúa, con asistencia multitudinaria de gente con sus mascotas para esterilizarlas en consultorios improvisados.